Presupuestos 2014

Durante las próximas semanas oiremos hablar de presupuestos. Y no porque sea un tema especialmente interesante o bonito, sino porque se trata del tablero en el que se van a dirimir hasta fin de año las batallas parlamentarias en Castilla-La Mancha y en España. La importancia que tiene para las Administraciones Públicas el cuantificar de la forma más aproximada posible la cantidad que van a ingresar durante el ejercicio, así como los gastos a los que van a tener que hacer frente, es de vital importancia. Mañana mismo cuando se califiquen por la mesa de las Cortes iniciarán su andadura parlamentaria los de nuestra región al igual que ya se ha iniciado la tramitación de los del Estado. En este último caso se trata de un presupuesto que tiene en cuenta la situación de la economía nacional y el hecho de que nunca antes hubiésemos tenido una situación económica tan deteriorada que ha hecho que se tengan que adoptar numerosas iniciativas dirigidas por una parte al reequilibrio de las cuentas públicas en todos los niveles de las Administraciones Públicas y, por otra, a aplicar reformas estructurales que mejoren la competitividad de la economía y el acceso al crédito.

Y por supuesto continúa la senda de ajuste fiscal de los presupuestos 2012 y 2013, reforzando la política de consolidación fiscal iniciada al comienzo de la legislatura. Y es que “vivimos tiempos recios” como dejó escrito santa Teresa de Jesús refiriéndose a la situación por la que atravesaba la Iglesia, y esos tiempos recios hay que afrontarlos precisamente con esfuerzo compartido y sin poner palos en la rueda. La puesta en marcha de medidas como el  Plan de Garantías de los Servicios Sociales Básicos se trataba en esencia de eso, de un esfuerzo compartido. Ante una situación crítica de la región, una región endeudada y al borde del colapso, se nos pidió un esfuerzo conjunto y sostenido que algunos no han querido hacer. Los que gobernaron hasta antes de ayer y fueron los causantes últimos de la situación se pusieron enfrente, en vez de trabajar codo con codo en la salida de la crisis. Y así siguen, ahora criticando desaforadamente los presupuestos tanto nacionales como regionales y acusando a los actuales dirigentes de maltratar a nuestra tierra. Y digo yo ¿qué mayor maltrato para nuestra tierra que dilapidar sus recursos, gastar sin freno y asfixiar a los proveedores con impagos? Los malos gobernantes que hemos tenido salen ahora a la palestra criticando las medidas adoptadas y obviando que en el caso de haber sido gestores de una empresa privada estarían procesados por administración desleal e inhabilitados para dedicarse a la gestión. Estos presupuestos son los primeros presupuestos de la recuperación, pero aunque los tiempos de ajustes ya han pasado en nuestra región y se vislumbra la recuperación económica, todavía en 2014 más de mil millones de euros irán destinados a pagar y refinanciar la deuda. La presidenta Cospedal ha querido que en estos presupuestos se proteja el gasto social y por ello el 85,6% del techo de gasto va destinado a esos fines. Se tratan por tanto de unos presupuestos austeros pero realistas que vuelven a poner el énfasis no en las grandes obras sino en las personas. García-Page y los suyos están a otras cosas, están a lo suyo. Cospedal y su Gobierno están a lo que tienen que estar para garantizar que Castilla-La Mancha nunca más vuelva a estar al borde de la quiebra y del concurso de acreedores.