Francisco García-Pavón cuenta en una de sus historias de Plinio, la divertida anécdota de ese diputado por Tomelloso de principios de siglo que, afincado en Madrid, conocía poco esta tierra manchega. Afirma que una delegación de notables del pueblo acudió a visitarlo y que éste les preguntó por sus intereses: -“¿qué queréis, hijos de Tomelloso?”- a lo que un guasón contestó: -“queremos que Tomelloso sea puerto de mar”-. -“concedío”-, fue la rápida respuesta de su señoría, ante el alborozo general. Por desgracia algo así parece que está pasando en esta nueva era de la política caracterizada por gobiernos de perdedores que, al encontrarse en manos de otros, no tienen más remedio que conceder todo lo que les piden. En Ciudad Real tenemos ejemplos casi tan graves como lo del puerto de mar. Al inicio de la legislatura Ganemos pidió controlar una empresa pública en liquidación que tanto el PSOE como Ganemos habían pedido su cierre en múltiples ocasiones. Parece que esa empresa quiere mover más de cinco millones de euros del presupuesto municipal. Pidieron presidir la empresa y Pilar Zamora dijo: “concedío”. Más tarde, en la tramitación de los presupuestos, pidieron eliminar las subvenciones a los toros y a la Hermandad de la Virgen del Prado, entre otras. La respuesta de Zamora: “concedío”. Y así en muchas más cosas que no sabemos porque nos niegan la información, pero que a la larga terminaremos sabiendo.
Algo parecido pasa en la Castilla-La Mancha de García-Page, perdedor de las elecciones pero también presidente gracias a los radicales de PODEMOS. Sí, esos que van a Venezuela en el avión presidencial junto a separatistas y pro etarras, no sabemos muy bien a qué. Esos son los mismos que están manteniendo en el sillón a García-Page y que cuando abren la boca García-Page también contesta raudo y veloz: “concedío”. A estos efectos y mientras cuente con ellos, para mí Page también iba montado en ese avión. Y mientras tanto la sanidad y la educación haciendo aguas en la región. Recientemente el sindicato ANPE ha denunciado que, para este próximo curso 2016/17, la propuesta de la Consejería de Educación, es eliminar 83 plazas de maestros y 124 plazas de los centros de enseñanzas medias. Para el sindicato se ahonda en una situación que el gobierno socialista se comprometió a solucionar y que lejos de ello, la agrava. La tasa de abandono escolar vuelve a repuntar cuando en la legislatura de Cospedal se redujo casi en diez puntos la tasa de abandono educativo, situándola en el 22,2 %. En la sanidad tres cuartos de lo mismo. Mientras el consejero de Sanidad se paseaba por FITUR un día sí y otro también, las listas de espera siguen aumentando. Se derivan pacientes a la sanidad privada y no se sustituyen las bajas en los centros de salud llegándose a situaciones de verdadero caos en algunos centros. Esperemos que al menos la epidemia de legionela en Manzanares y que ha causado cuatro muertes, haya servido para establecer protocolos de información y de actuación en la actual consejería, más allá de los fotoplanes a los que nos tienen acostumbrados. Creo sinceramente que este Gobierno va a pasar a la historia como el más ineficaz de los que ha tenido Castilla-La Mancha, y mientras los ciudadanos padecemos sus consecuencias, García-Page sigue entonando su: “concedío”, para contentar a los que le sustentan en el poder.
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