Se atribuye a Sir Winston Churchill la frase «Una nación que intente prosperar a base de impuestos es como un hombre con los pies en un cubo tratando de levantarse tirando del asa». Siendo en esencia una afirmación verdadera, no es menos cierto que, a veces, las circunstancias sobrevenidas o los compromisos adquiridos con organizaciones supranacionales, léase Fondo Monetario Internacional, hacen que algunas subidas de los mismos sean inevitables. Por situación sobrevenida me refiero, por ejemplo, a que un gobierno saliente te diga que te deja un déficit del 6% cuando en realidad era del 9%. Esto no es ficción, es lo que pasó en España cuando el Gobierno de Mariano Rajoy ganó las elecciones. Se trata de situaciones que hacen que un gobierno se tenga que replantear sus prioridades para evitar el colapso económico, financiero y social del país. Ahora, tres años después, la situación es infinitamente mejor. La crisis se va desvaneciendo y es posible bajar los impuestos. El Gobierno de Rajoy, el de Cospedal y el de la mayoría de los gobiernos locales en los que gobierna el Partido Popular, bajarán sus impuestos para 2015 y yo, como ciudadano y como contribuyente, me alegro.
En nuestra región, en Castilla-La Mancha, la presidenta Cospedal ha anunciado que bajará los impuestos al 100% de los contribuyentes, especialmente a las rentas medias y bajas. Castilla-La Mancha se convierte en la Comunidad Autónoma con el tipo impositivo más bajo del IRPF para el tramo de menos renta (11% hasta 17.000 euros). Además ha reducido 8 puntos de déficit en tres años y es la región de toda España con mejor eficiencia presupuestaria. En el ámbito local muchos alcaldes del PP de la provincia de Ciudad Real han anunciado bajada de tasas e impuestos para 2015, señal inequívoca de que algo empieza a cambiar y que la situación mejora, ya que de lo contrario los interventores municipales no habrían dejado efectuar esas rebajas. Centrándonos en la capital, los vecinos de la misma nos beneficiaremos de una triple mejora. La rebaja nacional, la regional y la local. Hace pocos días, la alcaldesa Rosa Romero anunció las líneas generales del proyecto de Ordenanzas Fiscales para 2015. La aprobación de las mismas supondrá una disminución en el 75% de los tributos municipales. Además “el que no tenga bajada, se va a congelar”, aseguró la alcaldesa. Sobre las tasas explicó que se van a bajar un 1% 20 de las 30 tasas municipales, como las relativas a la expedición de documentos, servicio de grúas, la utilización de terrazas, las tasas de cementerio o las bodas civiles, entre otras. Además de esta bajada generalizada, el Ayuntamiento también reducirá otro tipo de precios públicos como el relativo al alquiler de las diversas instalaciones deportivas municipales, que bajarán “una media de un 10%” o en el recibo de basura que, se reducirá un 5% para aquellos que opten por domiciliar sus recibos en el banco. Lo que no parece normal es que ni siquiera estas medidas claramente favorecedoras les parezcan bien a la oposición municipal. Vivir para ver.
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