Ya de lleno en la campaña electoral municipal. “La campaña”, por antonomasia. La campaña como ese conjunto de actos o esfuerzos de índole diversa que se aplica a conseguir un fin determinado. Aunque por los recursos humanos, materiales, logísticos, e incluso tácticos empleados, quizá quedaría más cerca de la acepción militar de campaña, como el periodo en el que los ejércitos están fuera de sus cuarteles en operaciones de guerra. Y desde luego así nos encontramos, fuera de nuestros cuarteles, llevando a todos los rincones de la ciudad las medidas y propuestas de Rosa Romero para Ciudad Real, tu ciudad. A algunos puede que no les guste esta sección que no deja de ser una sección política, no literaria, en la que un político, en este caso yo, deja constancia por escrito de sus ideas y percepciones durante estos días, además de trasladar a la ciudadanía los mensajes necesarios a favor de mi partido y de mis candidatas. Porque una campaña da para mucho. La de las Galias, por ejemplo, sirvió a Julio César para escribir siete libros en los que contaba esas campañas desarrolladas durante siete años (del 58 al 52 AC). Y no tenía afán pedagógico o divulgador, sino más bien propagandístico para extender la aureola de su fama, explicando de una forma aparentemente aséptica, la importancia y dificultad de sus hazañas. No pretendo ponerme a la altura del divino César pero he de decir que pasados los años, y gracias a Doña Carmen Blanco y Doña María José Cárdenas, mis profesoras de Latín, aún recuerdo y de vez en cuando releo aquello de “Gallia est ovnis divisa in partes tres, quórum unam incolunt Belgae (…)” una historia que para mí está a la altura de “Juego de Tronos”, por lo menos. En fin, que me pierdo en los procelosos mares de la adolescencia pretérita.
Centrándonos en esta campaña, he de decir que las percepciones son muy positivas. El fenómeno de los llamados “partidos emergentes” se está desinflando, y a medida que sube el ritmo de la campaña electoral se comprueba cómo sus candidatos, que en principio se vendían como soplo de frescura, chocan con la dura realidad y comprobamos cómo sus medidas o son irrealizables por utópicas o bien ellos mismos tienen una propensión absoluta a meter la pata y decir insensateces. Rosa Romero sigue cada día por los barrios de Ciudad Real desgranando una a una sus propuestas. Propuestas razonables y sensatas que son las que necesita Ciudad Real. Tras un periodo de zozobra económica, ahora toca consolidar lo logrado. “Habla con Rosa” no solo es un hashtag de Twitter, sino que es el leit-motiv de la forma de gobernar de Rosa Romero. Por eso cuando lleva sus propuestas a los barrios son muchos los que se acercan a escuchar de primera mano las medidas realizadas y todo lo que queda por hacer. Especialmente reseñable me parece la visita al Barrio de la Granja de nuestra ciudad. Un barrio con unas necesidades especiales y en el que Rosa Romero va a seguir creyendo, como en el resto de la ciudad. Un barrio en el que las familias demandan principalmente trabajo y seguridad. Vamos a trabajar para que los jóvenes desempleados de ese barrio tengan las mismas oportunidades que los jóvenes de otras partes de la ciudad, con la puesta en marcha de un ambicioso plan de empleo. El presupuesto seguirá contemplando partidas de gasto social muy importante y la seguridad se va a reforzar de forma que los vecinos del barrio también perciban a nuestra ciudad como lo que es, una de las más seguras de España. El compromiso de Rosa Romero y del Partido Popular es claro. El de los demás, no lo sabemos.
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